Dos grandes masas continentales que juntas abarcan 14.000 kilómetros de norte a sur, desde la tundra ártica hasta la punta azotada por el viento de la Tierra del Fuego: para tener éxito en el continente americano, hay que afrontar desafíos logísticos extremos, y entender al detalle cómo funciona el negocio.
Esto es especialmente relevante para los servicios de envío de proyectos, como demuestran los ejemplos actuales de Perú y Chile.
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18 grandes bobinas de cable llegando a su destino final: el desierto de Atacama.
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En el desierto de Atacama, que tiene una extensión de más de 1.200 kilómetros desde el sur de Perú hasta el norte de Chile, llueve una vez cada varios años.
En este medio inhóspito es difícil que haya vida. Sin embargo, para las plantas de energía solar, las condiciones climáticas son perfectas, ya que casi no hay nubes que puedan tapar al sol. Se está construyendo actualmente un parque solar como este en el sur de Perú, a 1.140 kilómetros al sur de su capital, Lima, en el límite del desierto de Atacama.
Con el fin de transportar la energía de los colectores hasta los consumidores, una empresa española está enviando cable de alta calidad hasta el sur de Perú. La organización del envío a través de más de 10.000 kilómetros se realizó a cargo de DACHSER Air & Sea Logistics.
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